Nace una pregunta

¿Por qué la política habla tanto de la educación y la educación no se mete en política?. Cualquier político que sea consultado, se encuentre en campaña o no, va a nombrar a la educación junto con la salud (y ahora esta de moda la seguridad, o inseguridad), como uno de los temas primordiales.

Pero mi reclamo, mi preocupación, viene dada por la parte que le corresponde a la educación. Como alumno de la UNC noto una participación escasa en materia política, prácticamente nula, que solo se limita a los centros de estudiantes, los cuales mas bien se dedican a una política interna, de confrontación entre las diversas agrupaciones de cada facultad.

Lo que no existe es un espacio de debate político, que incluya alumnos, profesores, directivos y a cualquier despistado que de casualidad se le ocurra entrar a ver sobre que están hablando estos muchachos. Educar tiene que significar necesariamente hacer política.

Quizás sea entendible, aunque no lo creo, que no se hable de política en facultades de física o química. Pero no se entiende en facultades como Ciencias de la Información. ¿Qué paso? ¿Fue tan efectiva la etapa neoliberal que nos saco las ganas siquiera de discutir? No estoy diciendo que no haya charlas organizadas por la izquierda que siempre esta, pero no esta nunca, o por lo menos no esta nunca cuando tiene que estar, porque si las hay, pero cuan lejos están de la realidad.

Y esa es la falla. No se debate lo que pasa hoy. No se debate porque ya gran parte de la gente -refiriéndome particularmente a los sectores medios- no cree en la política, no les interesa. Si de algo estoy seguro es que si ni siquiera se hace el intento es mas probable que no se pueda cambiar nada.

A modo de ejemplo puedo nombrar el poco interés que la gran mayoría de los estudiantes de comunicación (ni hablar de el resto de las facultades) tienen sobre lo que es una ley que los va a acompañar toda su vida y de la cual su trabajo depende como es la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. En este caso, si hubo distintos debates y foros, e incluso discusiones dentro de algunas cátedras, pero la mayor parte del alumnado solo asistió a un foro, donde estuvo presente Gabriel Mariotto, porque desde una cátedra se les requería hacer un trabajo al respecto.

Es decir, ¿Solo nos interesamos cuando nos "obligan"? Bueno, que nos "obliguen" entonces. Que “política” sea una materia mas y que este presente en todas las facultades. No “enseñar”, mas bien no debatir, no discutir, no participar en política es un error muy grave porque como decía Bertolt Brech: “El peor analfabeto es el analfabeto político. No oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos. No sabe que el costo de la vida, el precio del poroto, del pan, de la harina, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas.
El analfabeto político es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política. No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado y el peor de todos los bandidos que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales”.

Sin embargo no creo que este todo perdido. Soy un nuevo optimista, no siempre lo fui, pero creo que estamos viviendo otros tiempos, los 90’ ya pasaron aunque algunos no se den cuenta. El tema da para largo y todavía no lo tengo bien pulido, pero lo tenia atragantado y lo tenia que largar asi, con las pocas ideas que tenia.